Archivo del blog

sábado, 20 de abril de 2024

“Senyor, heretat meva i calça meu “

 ¿Que significa Aquesta frase?  ¿El  Senyor es Jesús o Deu.?

Jo ho entenc així:

DEu M’ha fet hereu, de Jesús a qui ha posat a la meva disposició,i també ha posat a la meva disposició el calce del Senyor que significa la seve sang vesada per nosaltres en la passió i mort  de Jesús.

Deu ens ha fet un regal molt personal, i quina utilitat te? Aixó ens introdueix a una NOVA VIDA,cal entendre de que va aquesta nova vida.

Aixó toca a la sensibilitat de cadescu, Es tracta de quelcom que treballa a nivell de consciencia , al nivell mes  intim de la persona,però qui HO ESCOLTA, li aporta en el llenguatge i l’ acció noves manifestacions.

En principi es tracta de una mirada positiva sobre tot l’entorn, una mirada en favor de la vida de tota vida , y de tot allò que la posibilita, acompanyat de sentiments de gratitut  i d'estimació vers tot i tothom .     

 

viernes, 19 de abril de 2024

LA ÉTICA NECESARIA PARA LA CONVIVENCIA

 1.-Reconocer el papel del Creador en la creacion y mantener una actitud de Servicio, en funcion de como él lo ha dispuesto todo.

 Al creador le llamamos Dios y es único, nadie puede estar por encima de Él ni igual a él.

De todas maneras ha hecho, al hombre capaz de dialogar con el.

No es representable en ninguna obra humana.

2.-Sus manifestacions son pròpies y exclusives de El.

No podemos vanalizar sobre él pues es nuestro referente supremo.

(Relacion Jesucristo-Dios para los creyentes cristianos). 

3.- Por la implicación que tiene en nuestras vidas, debemos dedicarle un tiempo periodicamente, por ejemplo cada semana, de reconocimiento de dialogo y de  alabanza.                                                                                                                                                    4.-Servicio mutuo entre família y Sociedad, con especial atencion en el ambito familiar mediante los elementos reguladores de la covivencia.(En cuanto a los elemetos reguladores se trata basicamente  de acuerdos de horarios de disponibilidad de los elementos de disposición común y reparto de tareas en el espacio común, respetar los ambitos personales, y en los comunes cada uno se mantenga en sus competencias, las labores que en la convivencia se asigna a cada uno)

(El reino de Dios para los creyentes cristianos).

5.-Consideración y respeto a la vida humana

    Respeto a la dignidad  de las personas humanas.

Valorarnos mutuamente en la convivencia y en la colaboracion mutua  edificamos una sociedad en Paz .                                                                                                                                         

6.-Relacion entre hombre y mujer desde el conocimiento del propio cuerpo y del ajeno; de sentimientos  afectos y pasiones. La responsbilidad sobre la generacion humana es nuestra.

El amor de Pareja es una modalidad ejecutiva del amor de Dios.

(Carisma de Virginidad, evaluable desde el cristinismo) 

7.-Destino universal de los bienes temporales. 

Medios de distribucion equitativos de manera que todo el mundo tenga lo necesario para su desarrollo y subsistencia.

8.- vivir en la verdad. Reconocer la verdad en los demàs.

9.-Purificación del corazón; combate por mantenerse sin engaños en la cumplimentación del desarrollo personal.

10.- Corazón desprendido de posesion del mundo y fomentar los sentimientos espirituales.  Controlar las pasiones.

lunes, 8 de abril de 2024

LA MEVA LLIBERTAT

 


La meva llibertat sense l'Esperit Sant és pura aparença, perquè ell és la llibertat plena. On és ell present hi ha vida, i si ell es retira tot desapareix. Però a més, com més ell sigui present amb la seva gràcia, amb el seu impuls, amb el seu amor, més lliure sóc. Perquè ell és pura llibertat. Si no deixo que ell m'impulsi, llavors em deixo impulsar pels meus desitjos, les meves insatisfaccions, la meva necessitat de posseir, i així cada cop necessito més coses per sentir-me bé, i res no em conforma.

 

Per això, en lloc de ser lliure, em torno un trist esclau dels meus impulsos naturals, i em converteixo en un penell descontrolat que es mou on la porta el vent. Acabo perdent la meva llibertat. Qui pot dir que té un cor lliure si està infectat i ofegat per les rancúnies, les tristeses, els desitjos egoistes, l'orgull, i mai se sent satisfet, i va perdent l'alegria en aquest dolor de la insatisfacció? Millor busquem la llibertat de l´Esperit.

lunes, 18 de marzo de 2024

Compartiendo el espiritu del adviento

 

Compartiremos hoy algo del espíritu del ADVIENTO.   

Compartiremos sobre el sentido del ADVIENTO, como preparación a la Navidad

Durante el Adviento, los textos de la Palabra de Dios nos quieren HACER REVIVIR la EXPECTATIVA del antiguo Israel, y por eso la Liturgia nos propone textos del A.T.

en los que se encierran las más hermosas y esperanzadoras promesas de la salvación que Dios nos ofrece

Así la 1.ª lectura de ayer de 2º domingo de adviento que empieza así: "CONSOLAD, CONSOLAD A MI PUEBLO"

Así mismo, la de hoy, también del Profeta Isaías 35, Que se alegre el desierto y la tierra seca, que con flores se alegra la pradera…

El Adviento quiere hacernos revivir aquella enorme expectativa

para que nos llenemos de nuevo, nos saciemos celebrando otra vez, de forma nueva y más profunda CADA NATIVIDAD DEL SEÑOR
Y es que, LA NATIVIDAD
es el inicio del cumplimiento de las promesas de Dios en la Historia humana.

La Navidad inaugura y es el inicio de nuestra salvación en el tiempo, que será plena y a la vista de todos, en el momento que sólo la sabiduría del Padre tiene previsto, que como ayer Pedro en la 21 lectura recordaba, no es que el Señor tarde en realizar la salvación, es que por su misericordia tiene gran paciencia porque quiere

la salvación de todos.

 La NATIVIDAD como inicio, bien real de la salvación no es sólo un recuerdo, sino que continúa produciéndose en cada generación humana. Su venida en carne, resucitado y en el espíritu sigue sucediendo con todo aquel que cree.

De nada sirve su venida de entonces a aquel que no le recibe ahora en su vida.

Ahora ha de suceder exactamente igual que en la Anunciación a María: ACOGER

A CRISTO EN NOSOTROS POR OBRA DEL ESPIRITU SANTO. La propuesta del Señor coincide con el plan de salvación de Dios que es venir a nacer en el hombre, crecer, vivir en el y esto ocurre si nuestra actitud es también "BAGASE EN MI SEGUN TU PALABRA"

¿Qué fue lo que pasó entonces, cuando María -no olvidemos, figura profética para toda y de toda la iglesia- en esta actitud de fe y sumisión a Dios pronunció aquellas palabras? “Sí, hágase en mí, según tu palabra “, entonces el Hijo de Dios se encarnó; y pudo nacer y luego crecer, realizar su misión salvadora por la Cruz y la Resurrección y ENVIAR SU ESPIRITU A TODA CARNE.

El ESPIRITU DE LA NAVIDAD es que de forma similar suceda en nuestra existencia, también en la de los que ya creemos, porque siempre nos faltará HASTA LLEGAR A LA EDAD ADULTA DE CRISTO, como dice la Escritura, hasta ser llenos del Espíritu Santo y -única­mente guiados y gobernados por El; siempre podemos ser más y más transparencia de la auténtica vida en Dios a través nuestro por obra del Espíritu Santo, que se difunda e ilumine y de luz y sabor a la vida de los hombres.

Nosotros los cristianos, ahora no nos podemos quedar solo en la expectativa de salvación sino que en los humanos se está realizando ya de manera plena, realidad de la que Dios ya ha hecho Y eso SE HA DE NOTAR.


¿EN QUE?: en que en n/vida tiene OTROS VALORES

" ENFOQUES " INTERESES " METAS

" ACTITUDES

" SENTIMIENTOS " OBRAS


: LOS DE CRISTO


Es decir, SE TIENE QUE NOTAR "UN AIRE DE FAMILIA", la familia de Dios de la que

 

Cristo es Cabeza                                                                                          

En este vivir al AIRE y al ESTILO de Hijos de Dios, podríamos decir muchas cosas, pero os invitamos a algo que ES UNA NECESIDAD PATENTE EN N/IGLESIA:

LA RELACION FRATERNAL, DE HERMANOS EN LA FE


Mirad: toda

REDESCUBRIR


esa encarnación de la vida de Cristo Jesús

en nuestra vida personal ES CUERPO real

porque SOMOS UN CUERPO debe comunicarse la vida en el cuerpo y el alimento y no de una manera etérea, sino EN el

y OPTAR POR VIVIR "LA DIMENSION COMUNITARIA DE LA VIDA DE FE"


 

FORMARNOS JUNTOS

REVISAR JUNTOS LA VIDA

DECIDIR JUNTOS

como continuación de ORAR JUNTOS, que es lo que hacemos aquí y en la Eucaristía.

Compromiso: eso a veces nos da miedo, porque ya tenemos muchos compromisos: familia, trabajo.... Pero para VIVIRLOS EN CRISTIANO nos falta el fundamento de ser piedras vivas apoyadas y bien trabadas en el fundamento que es Cristo, de forma comunitaria, como que resulte interpelante y atrayente, real como en CANAAN

,

los primeros tiempos: "mirad cómo se aman" decían los paganos. Y la Iglesia fue aumentando en Hijos de Dios. HOY ES URGENTE ESTA NECESIDAD. Quien tengas oídos para oír, que oiga.


sábado, 16 de marzo de 2024

UNA CRIDA AL DIALEG AMB DEU

 

DÉU. UNA CRIDA AL DIÀLEG


 

1. El partner (l’amic, el soci, el col·laborador) del Creador fet a imatge seva

El Déu de la Creació de Miquel-Àngel estenent la mà cap a l’home i quasi donant-li, mostra meravellosament la voluntat divina de fer-lo el seu amic.

El creient és l’oient amb capacitat de comunicació i de reciprocitat amb el seu Déu.

La dimensió profunda que ens constitueix com a persones és ser aptes per a la relació. Aquesta és la imatge de l’home que Déu ha creat. L’existència de la persona humana, sí, és transcendent, però tanmateix històrica i capaç de viure en una comunicació d’unitat i d’amor amb Déu.

El relat del llibre del Gènesi és el que va revelar millor la voluntat de Déu de fer de l’home el seu amic i col·laborador. “Déu digué: Fem l’home a imatge nostra”. Gn 3.

Déu s’ha revelat tal com és: com un PARE amb el seu fill, com un AMIC amb el seu amic, com un ENAMORAT amb la seva núvia i com un ESPÒS amb la seva esposa. Amb aquests 4 mots l’A.T. ha mostrat com és Déu i des d’aquí ha descrit  quina és la relació que nosaltres podem tenir amb ell en  la nostra pregària.

Déu és l’únic Absolut tant per a un cristià, com per a un musulmà, com, fins i tot per a un budista que viu sense Déu i per a un hinduista per a qui Déu és en tot i en tots. Tot místic és un expert d’aquest misteri pregon.

I també nosaltres, com Jesús, hem de gosar dir “Jo i el Pare som u”.

“Déu és amor i el qui està en l’amor està en Déu i Déu està en ell”. Per tant, estimar i ser estimat és consubstancial al nostre ésser amant. I encara més, al proïsme, no el podem tenir com a un “altre”, com a  algú fora de mi, ja que és algú amb qui Déu també s’hi identifica. (No existeix un “jo” sense un “tu”).

M’agrada l’expressió “Cosmoteándrica” amb que Raimon Panikkar definí la realitat. Ni Home sense Món ni sense Déu, ni Déu sense Món i sense Home, ni Món sense Home i sense Déu. La realitat és pura inter-in-dependència.

Déu és Déu i l’orant una criatura seva. “Seva” és la paraula que ens situa en la nostra plena unió amb Déu. La pertinença a Déu és el que ens concedeix de poder dir que som u amb Déu, no pas des de la igualtat sinó des de la pertinença. Déu és Déu, davant el qual ens inclinem profundament. Unitat, sí, però, en la diferència.

La grandesa de l’home està en allò que l’assimila al seu Creador. Coneixem Déu a partir de l’home creat a la seva imatge i coneixem l’home a partir de l’Encarnació de Déu en Jesús de Natzaret. Allò que l’home volia assolir elevant-se cap a Déu (relat de “Babel” del llibre del Gènesi) ho realitzà Déu davallant cap a l’home.

 

2.Què és l’oració?

La pregària cristiana és aquell diàleg que vivim amb el nostre Déu. En ella hi expressem, en viva correlació, la nostra intimitat. L’espiritualitat cristiana no ha estat mai marcada predominantment per la mística, sinó per l’oració, expressió d’una vivència de confiança creient en Déu enmig de la vida, amb una senzillesa i un realisme insubornables. Si Déu parla a l’home, l’home no pot parlar a Déu? L’oració ha de brollar de la nostra recerca apassionada del misteri diví, ja que és aquest el que ens legitima plenament com a persones creades a la seva imatge. La fe cristiana és fe en un Misteri!

L’oració ens introdueix en el diàleg diví i humà. Ell ens mena, amb tota senzillesa, fins a la profunditat de Déu. Hi entrem perquè la Trinitat mateixa ha fet de nosaltres el seu tu estimat. Un diàleg diví-humà, en la dissimilitud per antonomàsia, i sense anul·lació d’aquesta dissimilitud, s’hi exigeix la diferència del JO diví i del Tu humà.

La persona és la interlocutora i la comensal de què parla el llibre de l’Apocalipsi: “Mira, sóc a la porta i truco. Si algú escolta la meva veu i obre la porta, entraré a casa seva  i menjaré amb ell, i ell amb mi.” Ap 3,29

Amb la seva Encarnació Déu va eliminar la frontera entre cel i terra i abolí els obstacles que els separaven. Fins i tot la mort ha de ser concebuda com el llindar sagrat de la vida infinita. Sí, en la seva Encarnació en Jesús de Natzaret Déu assolí la seva suprema proximitat i la manera més pura i expressiva per revelar-nos el seu amor i la seva voluntat de ser-amb-nosaltres, i l’acte sagrat que li oferí també de viure la realitat històrica que caracteritza la humanitat: la debilitat i la feblesa. L’abaixament diví no fou, per a Ell, no obstant, un empobriment sinó el davallament inefable de la seva divinitat. Jesús esdevingué l’Encarnació del Déu amagat en l’A.T. I nosaltres gosem creure en aquest Déu que Jesús ens ha revelat. I aquest Déu és el Déu de la nostra pregària.

No oblidem que Déu, que és el nostre Creador, (fe constitutiva del nostre Credo) i que ens ha creat amb ganes de correlació d’ell amb nosaltres. Relació d’Amic i Amat. I els salms ens inviten a viure-la com ho feien els seus salmistes: amb humilitat, amb reverència, amb gosadia, amb amistat, amb confiança, amb amor.

Comunió divina-humana, però sense anul·lar la dissimilitud que exigeix el fet que Déu i la persona humana siguin diferents. L’amor de Déu no elimina en absolut la dissimilitud per antonomàsia del misteri de Déu.

El relat de la Creació de l’home és el nostre fonament místic: Déu creà l’home fent-lo participant de la seva plenitud divina. El Déu cristià no és l’absolutament altre. És el JO DIVÍ de la nostra relació personal, humana i divina.

L’autoafirmació divina: “JO SÓC” és en referència amb el nostre “TU” humà.

 

3. A quin Déu prega el cristià?

El Déu de la fe cristiana és el que ens ha revelat el Crist. “EI Déu que s’encarnà en Jesús, Verb de Déu, Déu de Déu, de la mateixa naturalesa que el Pare, fet home”. La història del pensament cristià ha anat aprofundint en el misteri de l’Encarnació divina. Narrada com la història de JESÚS, que, sense deixar de ser Déu s’ha fet home.

Déu compassiu: tendre i misericordiós, i benigne, lent per al càstig,  fidel en l’amor. Així comprenia l’A.T. Déu, i així ens el revelà plenament Jesús.

Déu de la tendresa i de la filantropia, ja que és l’home el centre del seu amor. L’A.T. amb aquestes afirmacions fa de Déu la millor revelació de l’ésser diví en la seva relació amb l’home. La traducció del mot hebreu RAHAMIN per misericòrdia i compassió diu tota  la riquesa de l’amor entranyable de Déu = que és adhesió instintiva de l’ésser vers allò que neix d’ell, amb aquella passió amb la que queden lligades mare i fill.

És amb aquesta paraula RAHAMIN amb la que suplicaven els cecs i els leprosos a Jesús, i és la mateixa que mogué Jesús quan veié plorar la viuda de Naïm que havia perdut el fill.

La paràbola del fill pròdig (Lc 15) és la que millor expressa el que és l’essencial de Déu i és el cim de la revelació de la seva misericòrdia.

Cal sostenir la transcendència de Déu, sí, i amb la mateixa força i contundència, cal confessar la radical proximitat de l’home a Déu. L’encarnació divina ha mostrat la forta voluntat d’estimar la humanitat. La teologia no pot ser tractada fora d’aquesta experiència. Si Déu fos el totalment Altre no hi hauria lloc per al coneixement, ni per a la pregària. El Déu a qui pregaren els salmistes era pròxim, amic, el qui ajuda, el qui parla amb nosaltres, metafísic, sí, però també la nostra plenitud.

No esdevenim menys humans quan descobrim la nostra vocació divina, ni Déu perdé la seva divinitat quan s’humanitzà. Certament, quan contemplem Déu en el Crucificat ens trobem en el nucli dur de la nostra fe cristiana. Sí, la Creu és  la bellesa sublim i suprema de l’amor diví lliurat, amb els braços oberts. La Creu ens revela quelcom molt profund de Déu.

Jesús, en la seva vida humana, visqué unes trobades molt riques en amistat i en diàleg. Pensem en Marta i Maria a Betània, amb la samaritana, parlant llargament en el pou de Jacob, al poble de Sicar de Samaria, amb Zaqueu i amb Mateu. Fou sobretot amb els seus deixebles que Jesús es relacionà com amb els seus partners, amics i companys. La passió que uneix dos enamorats és la millor expressió de la relació que ha unit sempre Déu i la humanitat.

Jesús de Natzaret ha estat la màxima revelació de l’amor de Déu, i de la revelació que nosaltres hem esdevingut el tu de la seva amistat i el qui de la seva entrega. Gràcies a l’abaixament de Jesús hem contemplat la manera de ser i de fer de Déu: DÉU ÉS AMOR i l’amor necessita encarnar-se.

 

4. El “TU DIVÏ” de la pregària (massa antropomòrfic?)

La teologia bíblica ens ha ensenyat a dialogar amb Déu. Sant Benet féu del llibre dels salms els veritables mestres de pregària dels seus monjos.

Els salmistes foren, sí, uns autèntics teòlegs, místics, cantors i poetes. Però, quin rostre i quin cor tenia el Senyor de la seva pregària? Alguns eren uns “tutejadors” de Déu, davant el qual, no obstant, s’inclinaven i adoraven. No podien suprimir, la seva Transcendència, però tampoc l’abraçada.

El diàleg diví-humà que ens ensenyà Jesús comporta tant l’adoració com el tuteig propi de l’amat i de l’amant. Sí, Déu és el Senyor i el Creador, el Transcendent, el Sant, l’Altíssim... però també l’Amic, l’Íntim, el que Estima, el Pare, el Mestre i el Metge, el qui escriu amb nosaltres una història d’amor i sovint també de sofrença. És així, per exemple, com els salmistes pregaven:

Déu meu, tu saps qui sóc jo 68,6. Les teves mans m’han fet i m’han creat 118, 73. M’has teixit a les entranyes de la mare 138,13. Has escoltat els meus anhels 60,6. Has penetrat els meus secrets, Senyor, i em coneixes 138,1.23. És admirable com ho saps tot 138,6. Guia’m per camins eterns. 138 23-24.  Era en aquest tuteig que afirmaven amb força: Jo, sabent que m’estimes tinc plena confiança 12,6. Compadeix-te de mi, Déu meu, tu que estimes tant 50,1...

És aquest el diàleg tan humà que el cristianisme porta a les entranyes.  Diàleg de respecte profund, d’admiració i d’adoració. L’amor té un rostre diví. Osees  i Ezequiel utilitzen les imatges de l’amor patern i de l’amor esponsal com a metàfores de la tendresa que porta Déu a mantenir-se en l’amor fidel, tot i els adulteris de l’estimada.... és el pur amor del qui estima al qui no és digne de ser estimat, no obstant això, estimant-lo li dóna tota la dignitat.

Diu el Bhakta=místic:No vull la unió sinó l’amor. Però no és per a mi per a qui anhelo l’amor, sinó per ell. ¿Què passaria si ell no pogués estimar-me? ...sento que hi ha algú que m’estima i el seu amor m’impulsa a respondre amb el meu amor, encara que de forma imperfecta, en l’esperança de poder-lo abraçar un dia, un dia que no coneixerà final. ...Déu només pot ser una persona.” (No puc donar-ne la cita) (apunts personals bloc 11, gris p. 61)

         El cristianisme és la religió de l’amor. Déu ha fet seva aquella definició que llegim en el Gènesi en la que Caín va refusar de fer seva: “guardià del seu germà”. El nostre Creador, ens vol com a company, amic i col·laborador. (A mi m’agrada dir-ne: el seu partner). L’amor real ha de ser sempre encarnat.

L’oració mística pot ser important però no l’oració suprema. Jo goso afirmar que el que és essencial de l’oració  cristiana és el diàleg amb Déu. Quan preguem no som uns espectadors anònims. Jesús ens ensenyà a pregar com ell pregava: com un fill al seu Pare. Sí, un diàleg del JO HUMÀ i al TU DIVÍ.

Jesús ens ha ensenyat a pregar dirigint-nos a Déu amb el mot ABBA! Pare! Quan contemplem Jesús pregant en els quatre Evangelis sempre pregava des d’allò que vivia, i dialogava amb el Pare intensificant la seva comunió i la seva confiança.

Sant Benet ens invita a viure des de la milícia de l’amor, sí. Però també des de l’anhel i del desig ESSENCIAL de l’ànima humana. Més que parlar d’una pregària mística parla de pregar “amb humilitat, reverència i amb una donació ben pura. ...amb puresa de cor i amb llàgrimes de compunció.” C.20 1-3.

 

 

5.Cridats a dialogar amb Déu  

Sí, tal com he començat, tornaria a recordar la Icona del Déu de la Creació de Miquel-Àngel estenent la mà cap a l’home i quasi donant-li, mostrant així meravellosament la voluntat divina de fer-lo el seu amic.

Aquest és el tema d’avui. El crit d’una pregària és escoltada per Déu  des del mismíssim costat de l’orant, el seu partner. No oblidem mai el Déu immanent al cor de l’home. Subratllar però la Immanència divina mai ha d’excloure la seva Transcendència, sempre unides en Déu.

SILENCI! Sí, sempre ens cal, paradoxalment, parlar del silenci. Però a mi també m’agrada molt recordar que no hi ha cap nucli urbà sense la seva ÀGORA, sense un lloc per a parlamentar. L’Àgora de la nostra pregària és el lloc sagrat on sabem que Déu hi és sempre. En ella hi podem expressar allò que sentim i que som! El cristianisme és la religió de la Paraula, més que la religió del silenci, i la legitimació de la Paraula és el diàleg.

És Déu mateix el qui ens hi parla, ens mira, ens contempla i ens estima. El silenci davant de Déu no és temps perdut, sinó la millor provocació no només per escoltar sinó també per dialogar amb Ell, compartint tant l’alegria com el sofriment, el  desig de la seva mirada com el reconeixement de la pròpia indignitat, la confiança i la soledat, la plenitud de vida o la por a morir.

Jesús i el Pare, fins i tot mai havien estat tan un de sol com en el patíbul de la Creu. I aquí en aquestes hores supremes de la vida de Jesús és on el Pare hi visqué un silenci més unitiu amb el Fill estimat. No abandonem ingènuament aquest lloc on la mort és la mort, on la Paraula s’ha fet silenci, on el mateix Fill ha sofert l’abandó fins a gosar dir: “Déu meu, Déu meu, perquè m’heu abandonat?” No contemplem ingènuament la Creu sense contemplar-hi, en el rostre del Crist, el rostre de tots els homes sofrents, on encara la Passió del Fill té un gran  AVUI.

Portem el sentit de Déu inscrit al cor. Sense aquest sentit diví, ni l’home digital ni l’home de les cavernes no trobarien el goig de la vida. L’essència de la pregària és dirigir-se vers un Altre en profunda relació amb Ell. Però recordem que la mística no substitueix l’experiència humana d’allò que som i vivim.  Per això pregunto: ¿Qui pot cantar quan se sent aclaparat i oprimit? I responc:  Algú per a qui Déu és Déu. Andrei Rublev, monjo rus i ortodox, va refusar de pintar un fresc del Judici final perquè estava massa en comunió amb la misèria del seu poble i temia de trair així la misericòrdia del seu Senyor.

Déu és un participant obligat de les nostres penes i alegries, i nosaltres uns suplicants i uns adoradors.

La pregària és un encontre sagrat, un lloc de vida, un espai compartit i viscut amb el Senyor. Un espai litúrgic! Hi ha d’haver sempre, però, una unitat misteriosa entre la litúrgia que celebrem i la que vivim.

Sí, hem estat cridats per Déu a una amistat amb ell, i aquesta s’acompleix en el cara a cara amb el Tu del nostre Creador.

 

6. I què és la litúrgia cristiana?

És la pregària d’una comunitat eclesial reunida, guiada per l’Esperit Sant, que és la seva ànima. Àmbit sagrat propi d’un encontre dialògic, per això, i a causa de la transcendència real que el constitueix, tant el silenci com el diàleg en són els seus elements fonamentals. No oblidem que el cristianisme és “la religió” de la Paraula.

La Litúrgia ¿és lluny de la unitat mística que tant Déu com l’home desitgem? No! En el N.T. el creient és el subjecte amb qui Déu dialoga. Ja els salmistes creien en un Déu en plena relació d’amistat amb l’home, i pregaven com un home que té dret a viure en diàleg humà-diví amb Déu. Per això el component essencial de la pregària oficial de l’Església continua essent el llibre dels salms; malgrat semblin molt distants de l’esperit evangèlic, ells segueixen configurant la pregària cristiana.

¿Hi ha una experiència del que és diví que no s’expressi en un diàleg interpersonal? ¿Pot concebre’s una pregària autèntica en què no hi hagi un Tu transcendent per a l’orant? ¿El TU DIVÍ de la pregària cristiana és massa antropomòrfic? L’ànima de Jesús va ser modelada tant des de les experiències humanes que visqué, com des de la permanent relació amb el Pare.

I la pregària LITÚRGICA ens ha d’invitar a viure apassionadament la comunió amb el Déu que ens ha volgut els seus interlocutors. “Déu s’ha fet home perquè l’home arribi a ser Déu”, frase que han cregut i han escrit tots els Pares de l’Església.

Un dels valors centrals de la Litúrgia és la CORRELACIÓ, sí, aquesta ha de ser la màxima legitimitat de la Litúrgia.

La pregària litúrgica ha de mantenir sempre viu l’espai humà on hi puguem expressar l’alegria, l’amor, el dol... mots i conceptes que, sovint necessitem dir-los per sobreviure. La litúrgia és essencialment la celebració que vivim com a membres de l’Església, oberts al Misteri de la nostra fe. M’agrada remarcar com en ella hi preguem des del “Senyor, tingueu pietat” fins al cant doxològic del “SANT, SANT, SANT és el Senyor...”

 

7. Mantinguem-nos lluny d’una religió líquida.

El cristianisme és la religió de l’amor, la religió del Verb i la religió de l’Esperit. Cal recordar que Jesús fa saltar les últimes barreres de l’amor fent-lo extensiu fins i tot als enemics.

Avui, una mena de religiositat líquida feta d’elements gnòstics, tècniques psico-corporals, i una concepció individualista i ahistòrica de la persona, s’estén pel món.

Prèvia a l’experiència mística hi ha l’experiència humana quotidiana, que la MÍSTICA transcendeix però no la substitueix.

La realitat és com un teixit vinculat amb la conjunció i. La nostra quotidianitat forma part del Misteri, sí, i nosaltres l’hem d’integrar donant-li l’espai que ens legitima com a partners del Diví Interlocutor. Justament la saviesa de la vida consisteix en la certesa que, malgrat les foscors, el camí condueix a la plenitud de l’ésser en plena reconciliació amb un mateix, amb els altres i amb Déu. Un origen i un fi teològics! De Déu venim i a Déu tornem.

Deixem que Déu sigui el nostre Tu i nosaltres siguem per a ell el seu.

 

Testimoni de Policarpo bisbe d’Esmirna

No quiso adorar al Cesar cuando llevava 85 años de cristiano

Como era una persona de un cierto relieve popular , el pueblo fué quien lo queria hacer adorar al Cesar el siguió negandose, apelando a su experiència cristiana,furiosos los opositores reunieron leña para quemarlo vivo, El ofrece a Dios su vida en martirio, esperando ser recibido en la casa del Padre.

en recerca de l'essencial

 

EN RECERCA DE L’ESSENCIAL

 

INTRODUCCIÓ

Viure en recerca constant d’allò que és essencial en la nostra vida, aixó dona consistència a la nostra felicitat i fa créixer la dimensió espiritual i humana que ens constitueix. No  podem substituir alegrament el SER per el TENIR, per exemple. La “modernitat líquida” ens envaeix fàcilment! Cal obrir els ulls a l’horitzó diví i arrelar la fe en la Transcendència que plana damunt nostre de forma immanent i ens habitarà plenament quan serem u amb Déu.

«El qui és la Paraula s’ha fet home i ha habitat entre nosaltres, i hem contemplat la seva glòria» (Jn 1,24). Sí, Déu s’ha encarnat per dir-nos: “US ESTIMO”. Hi ha quelcom més essencial en l’humà?

Uns sil·logismes de Martín Gelabert, o.p.: “Si l’ésser humà és capaç de Déu... és possible, analògicament, dir que Déu és capaç de ser humà... El Déu-Tot-Altre és també el Déu per al món...”. Del misteri de Déu sabem que, en Jesús, Déu, ha volgut fer del món el seu interlocutor, i la humanitat forma part d’aquest diàleg d’amor en pura correlació.

Vivim en aquest món des de la realitat cosmoteàndrica, tal com Déu el vol: unitat del Déu creador amb la humanitat i amb la creació que ens envolta. I nosaltres hem de voler viure la nostra legitimitat (allò que ens  pertany) tant amb Déu com amb el món, per tal com són els nostres interlocutors.

La grandesa d’aquesta voluntat divina ens invita a viure  apassionadament allò que n’és l’ESSENCIAL: el nostre ésser cridat a la comunió amb el Déu que ens vol els seus interlocutors.

Des de la Regla de Sant Benet i del que ens ha estat transmès per la Tradició dels nostres Pares contemplarem la riquesa divina que vivim amb tota legitimitat, allò que, amb tota gosadia, ens fa viure com a amics i amats de Déu i per tant allò que també ens fa sentir més humanament germans.

A partir de l’Encarnació de Déu en Jesús, Déu i l’home compartim tant la transcendència com la immanència. Totes dues ens són constituents. “Déu s’ha fet home perquè l’home arribi a ser Déu” és una frase que han cregut i han escrit tots els Pares de l’Església. Per als cristians, el Crist ha estat la irrupció de Déu a la Història.

         Al costat o a l’altre extrem del que jo crec essencial hi ha la mundanitat com a cultura de la superficialitat.

 

1.  Dimensió transcendent  de la nostra existència

a. Déu amb nosaltres. Crist, Jesús de Natzaret, l’Encarnació de la Trinitat, ens ha ensenyat a “tutejar Déu” en la pregària tot dirigint-nos a Ell amb el mot ABBA. Benet però ens parla de pregar amb humilitat i reverència, amb temor i amb llàgrimes de compunció. Dos matisos que es complementen: la Parresia-confiança (podem dir a Déu PARE) i el Temor reverencial (Déu és Déu). Tots dos ens són essencials.

Si Déu és amb nosaltres res és profà. Benet diu que fins cal “mirar tots els objectes i béns del monestir com si fossin objectes sagrats de l’altar” (RB 31,10) així l’àmbit transcendent que ens envolta genera una consciència, un estil, un mòbil, un deler espiritual i sobretot, una resposta: “Escoltar-acollir i posar en pràctica” ens diu sant Benet. La vida és tota ella un lloc teològic.

L’escolta ens situa plenament en l’àmbit de la transcendència: cercar la Presència de Déu i el diàleg amb Ell. Tanca la porta de la nostra cambra per entrar, amb fe i reverència, a la pregària i a l’adoració. El silenci i la pregària forgen, en la prova,  la paraula essencial i decisiva: “Pare, si és possible... però que no es faci el que jo vull sinó el que tu vols”, o també: “Aquí em tens...” per exemple.

Viure conscients del Déu amb nosaltres, repeteixo “Així com la persona humana té una tendència que el porta cap a Déu, hi ha una tendència en Déu que el porta cap el que és humà”. (Martín Gelabert, o.p)

 

b. La celebració comunitària de la Litúrgia. L’experiència interior i espiritual demana expressar de forma festiva la seva experiència transcendent. Els creients hem de ser signes d’una felicitat fonda i plena, fonamentada i construïda en la pura correlació amb Déu. La revelació de la qual ha estat la seva Encarnació. La pregària és per a la nostra vida un temps irrenunciable.

La Litúrgia és l’espai teològico-humà del creient. Les trobades comunitàries dels creients, la més central de les quals és l’Eucaristia, són el pilar fonamental on establim els moments privilegiats d’un diàleg pausat, festiu, íntim, i comunitari, amb Aquell que és l’objecte del nostre amor, i a qui sabem present en cada moment de la nostra vida. És bo viure la litúrgia com el moment més sagrat del nostre dia o de la nostra setmana.

Quin goig poder viure l’espai litúrgic no només com a escola d’espiritualitat, sinó també com un espai on els creients hi vivim la inefabilitat del Misteri que ens acompanya.

La vida monàstica desitja oferir un àmbit adequat per a l’encontre amb l’Absolut que ha volgut ser el nostre interlocutor.

 

c. Silenci. Sí, però no oblidem que nosaltres som “la religió” de la Paraula i per tant del diàleg. El silenci ens obra a aquella Realitat última que ja besllumem. Ell ens apropa a aquell horitzó potent del nostre camí, l’encontre amb l’Absolut. Totes les Tradicions religioses valoren el silenci, però l’objectiu de cada tradició  potser és diferent. En la “Cultura judeo-cristiana” el sentit transcendent ens és constitutiu. Si es pot dir quelcom del silenci és senzillament que la vivència humana està més enllà de la paraula.

Bíblicament la pregària és sempre l’àmbit sagrat d’un encontre diví-humà i, per tant, un encontre dialògic, però a causa de la transcendència real que el constitueix, el silenci n’és l’àmbit essencial.

L’experiència del silenci en la tradició cristiana es viu especialment en la pràctica diària de la lectio divina, però també al si de la quotidianitat on la transcendència ens fa viure conscients que som el temple on Déu viu i ens parla com l’Amic a l’Amat.

En el silenci de la pregària se’ns capacita per a mirar-ho tot amb la mirada de Déu i ens empeny a viure amb passió. El seu valor ESSENCIAL és el cor de la nostra antropologia, ja que sabem que són també SILENCI un sospir, una llàgrima, un perdó, un agraïment dens i pur. En ell hi experimentem i hi afirmem el nostre desig profund.

        

d. “Habitar amb ell mateix”.   Aquesta expressió la diu sant Gregori tres vegades de sant Benet quan s’apartà del món i anà a la gruta de Subiaco amb el desig de viure dedicat només a Déu. Era el desig de prendre’s seriosament la realitat profunda que li era  pròpia. Habitar en si mateix vol dir ser conscients que l’Esperit de Déu ens habita. És viure la CORRELACIÓ humana i divina de la nostra intimitat com en el seu temple. Aquesta correlació dóna a l’home la seva màxima dignitat. Habitar amb nosaltres mateixos fa transparent allò que som. Però aquest camí es viu entre consolació i desconsol, alegria i tristesa, optimisme i malenconia, llums i ombres.

 

e. La mort.  Sant Benet en el c. IV de la Regla, on hi descriu 74 instruments de les bones obres, diu: “Desitjar la vida eterna amb tot el deler espiritual”. V. 46

 Tota maduració i tot el que en la vida produeix fruit ha d’estar marcat per la mort. La mort viu al cor de tota realitat, sovint molt crua.

Ens agradi o no la dinàmica pasqual de la mort-resurrecció està incrustada en aquest món, i d’ella hem d’aprendre a viure més divinament ja que, en realitat, és la manera més humana de viure.

La nostra vida hauria de maldar sempre per estar en total coherència amb allò que som i amb la mirada vers l’horitzó al qual ens dirigim.

 

 

2. Dimensió immanent de la nostra existència

Conscients del Déu amb nosaltres, la dimensió d’immanència comporta la nostra resposta. Els creients som cridats a viure la gran aventura humana actuant “samaritànament”, afrontant junts els problemes del món. Aquesta actitud personal ens és ESSENCIAL.

És la resposta a la pregunta divina: “On és el teu germà?” D’aquí hauran de poder sorgir totes les altres posicions de caràcter immanent i essencials, sempre però conscients de la Transcendència que ens habita.

 

a. La Misericòrdia de Déu. Quan a les monges abans de ser admeses a començar el noviciat la Mare Abadessa ens preguntava: “Què demanes?” la nostra resposta era: “La misericòrdia de Déu”.

En la vida monàstica la misericòrdia de Déu no és només quelcom que té a Déu per subjecte sinó quelcom que Benet demana a l’abat “que faci prevaler sempre la misericòrdia sobre la justícia” 64,10 i que envolti el “germà excomunicat” amb tota la tendresa d’aquest atribut tan diví 27,8 i 9.  I Benet clou el gran c. 4 anomenat “Quins són els instruments de les bones obres” dient: “I no desesperar mai de la misericòrdia de Déu” 4,74.

        

b. El bon zel RB c.72. “Hi ha un zel d’amargor, dolent, que alllunya de Déu... hi ha un zel bo que porta a Déu.” Viure amb passió la dimensió d’immanència divina en el germà. La vida comunitària ens disposa a mirar-ho tot amb la mateixa mirada de Déu. Benet, al llarg de la seva Regla enriqueix els mots “bon zel” amb molts altres matisos: Caritat, Amor, Servir, Córrer, Progressar, Sol·licitud... “Que practiquin els monjos aquest zel amb un amor ferventíssim, és a dir, que s’avancin a honorar-se els uns als altres; que se suportin amb una gran paciència les seves febleses... que s’obeeixin amb emulació... que ningú no busqui allò que lli sembla útil per a ell, sinó més aviat el que ho sigui  per als altres,...” c.72

La Caritat amb el seu primer sinònim d’Estimar són l’expressió més concreta i vital de l’anhel i desig ESSENCIAL de l’ànima humana. Benet, fent seves les paraules del Deuteronomi comença el llarg c. 4t. Dient: “Abans de tot estimar el Senyor Déu amb tot el cor, amb tota l‘ànima, amb totes les forces. Després, el proïsme com a si mateix” i és el cim del gran capítol paulí de la primera carta als Corintis i que Pau descriu tan bellament: “L’AMOR tot ho excusa, tot ho creu, tot ho espera, tot ho suporta» (1 Co 13,7).

            Aquest bon zel Benet el descriu també amb gran radicalitat i amb una força joiosa amb el verb “Córrer”. Diu: “... corre a ple cor per la vida dels manaments de Déu amb una inefable dolçor de caritat” Pr 49 i al c. 5,10 diu: “és (l’obediència) que els empeny el deler de pujar a la vida eterna”. I tota la vida del monjo és una crida a una “militància” en el verb “ESTIMAR.

 

c. Invitats a respondre. Les persones que s’apropen als monestirs sovint veuen els seus murs entre admiració, incomprensió o indiferència. No obstant intueixen quelcom que elles mateixes cerquen.

Tot i els murs també els monjos ens preguntem: ¿com ens solidaritzem eficaçment en la passió del món? Discriminacions, desigualtats, guerres, tortures, injustícies... què podem fer perquè els monestirs siguem llocs de solidaritat amb el món? No podem tenir les portes tancades al món i ens esforcem en ser llocs d’acollida de tot aquell que cerca llum, refugi,... i desitgem ser també nosaltres un “OPEN ARMS” per a tothom que truqui a la porta.

Maldem per a respondre, de manera humana, a la irrupció divina damunt tota realitat. Configuració del nostre itinerari al d’Aquell al qui volem correspondre. Ens sabem receptors de l’amor tossudament misericordiós d’un Déu paternal i maternal alhora (Lc 15), i ens esforcem per fer nostres les sofrences dels nostres germans. Anhel ESSENCIAL de tot creient.

 

d. Pobresa-despreniment 33;55,18; 58,24-25. TENIR-HO TOT EN COMÚ! Norma bàsica de la Comunitat Cristiana primitiva i que Benet en féu una regla ESSENCIAL per els monjos quan en el c. 33 diu: “Sobretot cal que aquest vici –el de la propietat- sigui extirpat de soca-rel del monestir; que ningú no gosi ...tenir cap cosa com a pròpia, absolutament res...” I cita el text dels Actes dient: “Que tot sigui comú a tots”.  I vol que el monjo això ho expliciti en el moment de la seva Professió, dient: “Si posseeix béns, o que els distribueixi abans als pobres, o que amb una donació legal els cedeixi al monestir, sense reservar-se res de res; com qui sap que des d’aquell dia no tindrà potestat ni sobre el seu propi cos”. Aquesta és una comprensió totalment evangèlica ja que ens ajuda a descobrir que l’alegria perfecta es troba en el despreniment.

Als Pares del desert els agradava radicalitzar el text evangèlic dient: “Ves, ven tot el que ets...” i amb aquest canvi intentaven ser encara més contundents. Passar de l’esperit de possessió al de despossessió. És aquella actitud de fer de l’altre el primer, i que Emmanuel Levinas deia que és allò que diem davant d’una porta: “passi Vtè. primer”.

 

e. La comunitat. La vida de comunitat que cal contemplar com a valor ESSENCIAL és la presència del Déu amb nosaltres que viu la seva presència divina al si de casa nostra. Viure en comunitat és quelcom ESSENCIAL per a la persona humana. Ara, es pot viure amb els altres sense necessitat d’estar amb ells. No, la comunitat demana capacitat d’estimar i d’acollir gratuïtament, una gran dosis d’interès per l’altre i fer pròpia la vulnerabilitat dels altres.

Al si de la comunitat no hi ha només punts de vista diferents sinó també crides particulars de Déu, que siguin acollides per tothom. La pluralitat i la singularitat fan més bell el grup humà. L’àgora dels grecs ha de trobar en la comunitat el lloc on compartir el pensament, la cultura i les coses importants de la vida amb capacitat de lleialtat, de fidelitat i de profunditat. Tasca que cal viure amb una estimació que jo en diria terapèutica.

            No oblidem de mantenir la nostra mirada vers aquell horitzó sagrat que sempre ens acompanya. Militar en el verb “ESTIMAR” Gabriel Magalhâes.

 

f. Som pelegrins. Aquest és un tímid matís que ens constitueix a tots i que jo valoro com a essencial. Camí de la vida; pelegrinatge comú. Res és estàtic, cal progressar més i més en recerca d’aquella dimensió espiritual que ens legitima com a persones. El currícullum vitae que ens acredita en la societat esdevé obsolet en el nostre camí de pelegrins a través del qual anem forjant una identitat nova en la vida.

Quan apareix la tristesa en el nostre camí s’ens informa que en algun moment hem perdut de vista l’estrella polar i hem optat per seguir un camí equivocat. El pelegrí va lleuger d’equipatge, desprès de tot allò que és superflu, sap viure amb el mínim imprescindible, però té els ulls i el cor en el que és la seva meta final. Caminem vers la nostra Plenitud.

Cal saber, així i tot, gustar i assaborir la vida intensament, i així anar adquirint una saviesa que ens ensenya quelcom sorprenent: la vida real no es redueix només al que tenim entre mans. La meta final va perdent rellevància. No obstant això el camí en si mateix va adquirint importància i ocupant el lloc de la meta, i ens ressonen les paraules de Jesús: “Jo sóc el camí”. Jo 14,6. És en aquest Camí on es citen la Veritat i la Vida.

 

g. La INCULTURACIÓ DE LA RELIGIÓ. L’Evangeli és viscut per persones profundament arrelades a una cultura. Aquesta hauria de ser la petjada creient ESSENCIAL del cristià al si de la nostra societat. La INCULTURACIÓ és un mot del nostre temps; nasqué en la 32 Congregació General de la Companyia de Jesús, 1974-75 (ni el Concili la va citar encara). Però per a mi és quelcom essencial. “LA CULTURA essencialment  és la religió encarnada”. (T.S. Eliot) (I. Boada)

És l’esforç de l’Església per fer penetrar el missatge de Crist en un determinat ambient sociocultural. Inculturació és sinònim d’encarnació. La fe només pot desenvolupar-se en el marc d’una cultura. Per aquesta raó la religió ha d’estar atenta a les “llavors del Verb” presents en les cultures. La fe ajuda a fer que les cultures siguin més humanes i humanitzadores. Una religió que no es faci cultura no és plenament acollida. Inculturar la religió és assumir la cultura i obrir-la a la revelació de Déu.

Avui ens trobem i vivim en una societat pluralista en la que hi convivim diferents cultures, llengües i religions. Pensem i creiem que en tota cultura hi ha Llavors del Verb. Llavors de la Paraula de Déu = Déu  hi ha parlat!

 

h. Són, potser més essencials i fonamentals per els cristians els mots: Humilitat i Obediència; però a causa de l’espai d’aquesta reflexió em limito a dir-ho sense explicitar-ne el seu magistral contingut.

 

EPÍLEG

La paradoxa del nostre temps és que possibilita el màxim desenrotllament a nivell de xarxes, d’internet... però no garanteix la mínima mirada transcendent. El repte està en ser capaços de cultivar aquesta mirada.   

“...el fenomen religiós no pot ser subestimat, ell sol pot ser un factor de pau, d’equilibri, d’integració, de comunió i de diàleg... caldria fer-ne un tema de debat” Nicolàs Sarkozy. (ex-president de França)

Avui ens dol afirmar que tots aquells que no escullen l’assignatura de religió queden en una completa ignorància del fet religiós i es converteixen en culturalment incapaços de rebre i assimilar el que la història ens ha llegat com a fet religiós-cultural. Recloure’ns en la pròpia autoreferencialitat, no ens deixa créixer en la plena integritat vocacional, “renoveu espiritualment el vostre interior, ...revestiu-vos de l’home nou, creat a imatge de Déu. Ef 4,22-24.

Convindria preguntar-se si Cultura i Espiritualitat es poden separar com si fossin realitats autònomes i, a més, mirant-se amb desconfiança.

Com diu Gabriel Magalhâes “Tot i que el cristianisme no és un titanisme, la seva vivència real quotidiana reclama autenticitat”. L’Evangeli ens impossibilita, certament a tancar-nos en un plàcid idealisme subjectiu.

M’agrada cloure aquestes reflexions amb una frase del Papa Francesc que diu: “Que tothom sàpiga acollir la més alta vocació de ser artesà de la pau”.  Una gran ESSENCIALITAT a la que ens crida l’Evangeli molt especialment en els nostres dies.

La qualitat de les nostres essencialitats determina la qualitat de les nostres experiències espirituals personals.