Siete regles que aún sirven de san Bernardino de Siena cuyos
sermones improvisados en italiano eran rebosantes de vida y fervor religioso,
sentido del humor, y sabiduria pràctica. Habla claro de modo que quien te
escuche quede contento e iluminado y no deslumbrado.
1ª Aprecia
lo que estudias= dialogo con los autores de los libros.
2ª Centrate
en lo que haces, descartar males compañias y males lectures y a coses que
distraen de lo que hay que hacer.
3ª
tranquilidad: paz, no llenar la cabeza de otras coses, requiere silencio. “
Señor da reposo a mi mente”.
4ª Orden:
equilibrio en el cuerpo y en el Espiritu. Los extremos son malos; lo justo con
precisión, sin ambiguedades, puedes tener preferencias però sin menos preciar
lo que dejas.
5ª
Perseverancia: Tomar de los maestros y mantenerlo como propio; seguir en la
brecha a pesar de todo con una gran ilusión.
6ªDiscreción:
moderación, conseguir mis objetivos paso a paso.”quien mucho abarca poco
aprieta”.
7ª
Satisfacción: disfrutar con lo que hago, saborearlo despacio.
Navegar en
la nave de Dios: modestos sin insolència, libres sin hosquedad, dulce sin
afectación, complaciente sin devilidad.
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