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martes, 22 de agosto de 2017

adoración qué es y de donde nace

Sn. Rafael 11-5-15 Alabamos a Dios porque reconocemos lo que hemos recibido de él la naturaleza, la sociedad, la familia, los bienes materiales, nuestra propia alma y cuerpo, su amor y sus dones, le alabamos por una actitud de gratitud generalmente. Pero hay otro enfoque: cuando hablamos de la gloria de Dios, no hablamos de lo que hemos recibido, sencillamente contemplamos su grandeza a través de la creación a través de su Hijo Jesús, a través de los efectos que su espíritu realiza en nosotros, independientemente de que yo sea parte interesada en el asunto. Se trata de que admiremos la grandeza y la benevolencia del Señor, cuantas cosas la vida nos enseña para poder estar en la presencia del Señor. Saber reconocer todo lo que el Señor hace entre nosotros. En vísperas de la ascensión del Señor contemplemos la gloria que en eso nos manifiesta, un hecho sorprendente y admirable de Jesús ”cielo y tierra cantad himnos al creador, decidle al viento y al mar la gloria del Señor”, una imagen bonita y esclarecedora de lo que estamos comentando: cielo y tierra tienen un lenguaje que se nos invita a escuchar, un lenguaje de alabanza alegría y admiración como son los himnos dirigidos al que ha creado cielo y tierra, himnos lanzados al viento para que se esparzan por todas partes por la fuerza del viento, himnos también dirigidos al mar, a las profundidades donde no llega ni la luz ni el hombre, para que esto también, producto de la magnificencia de Dios, sea destino del himno de alabanza. Pueblos en libertad, campos en esplendor también nos hablan de la gloria de Dios, en cada elemento de la creación podemos contemplar la gloria de Dios; en la contemplación de Dios como tal, en aquello que le engrandece a nuestros ojos, es el punto de inflexión para entrar EN LA ADORACIÓN “Siempre cantaré y alabaré las maravillas de Dios, la gloria del Señor”. Escógenos para subir al Tabor contigo, si Cristo resucitado se eleva ante nosotros como testimonio de la elevación que nos corresponde, como parte del mensaje que Cristo nos transmite, anticipo de la efusión de su Espíritu sobre nosotros, que brille en nosotros su presencia, dándole acceso con toda libertad. La Virgen la contemplamos cercana a su hijo, a las grandes manifestaciones que su hijo celebra, en Caná, en la pasión y muerte, en la resurrección y seguramente en su ascensión, y seguro en el cenáculo para el Pentecostés, ella también escogida para presenciar, y siendo parte en los testimonios más destacados de la misión y mensaje de su hijo. A través de un momento de reflexión nos haga comprender esa manifestación del monte Tabor y ascendamos nosotros, en la bondad, en la mansedumbre, la misericordia, la paciencia, en el buen humor, la amabilidad, y así le glorifiquemos. Esa es la invitación que nos haces, pero para qué, para qué nos invitas, para poder ver tu transfiguración, para poder ver tu grandeza, lo maravilloso que tú eres, lo hermoso que tú eres Señor, para podernos gozar en ti, para poderte contemplar en toda tu gloria; oh Señor ¡ sí, tu eres nuestro gozo, tu eres nuestra alegría, tu eres nuestra esperanza, en ti está nuestro amor. El Señor contempló la tierra prometida, la tierra que nos prometía a nosotros y a todo el mundo, y allí se manifestó, esta tierra prometida a lo mejor está en el hogar de cada persona, en el corazón de cada persona, nos hace falta mirar esa amabilidad, esa bondad, de la tierra prometida. Salidos de una tierra desértica, inhóspita, no extraña que los apóstoles quisieran instalarse en el monte y montar tres tiendas, contemplando aquella presencia gloriosa y deslumbrante de Jesús, por encima de Moisés y Elías, quien otorga la ley y los profetas Digámosle al Señor que tienda quiere que hagamos en nuestro corazón : El domingo hablando con algunas personas hablamos de la situación de la familia , de la familia cristiana, notamos como el papa nos llama a orar por las familias por el sínodo que habrá sobre la familia en este año. Estábamos celebrando el 50 aniversario de matrimonio de unos amigos, hablando con sus hijas decían, hoy en día es un testimonio impresionante la fidelidad durante 50 años en pareja, todo un proyecto de vida dedicado a la generación humana, a los hijos y a los nietos en paz y armonía, de convivencia fiel, con la tolerancia mutua, en nuestros días cuantas parejas jóvenes después de haber celebrado solemnemente la boda, al cabo de un cierto tiempo, empiezan las tensiones en la convivencia, hasta que esta se rompe por la intolerancia, y los desacuerdos, y cuando hay hijos por medio los hijos pagan la rotura del núcleo familiar, ven en casa el disgusto de uno y una, doy gracias a Dios de poder hacer celebraciones como esta de ayer por lo que tiene de testimonio cristiano, y creo que hemos de orar para que las parejas sepan mantener la coherencia entre ellos, y el ámbito de confianza, sepan mantener el diálogo, creo que Dios escucha la oración aunque en nuestras propias familias tengamos casos de parejas rotas, pero también hay los que se mantienen fieles con un gran compromiso cristiano , estas parejas tensas y que se rompen nos dan también una lección sobre la realidad de la carne humana de cómo somos, de la debilidad humana, creo que hemos de escuchar la debilidad humana los condicionamientos culturales, las costumbres de él y ella divergentes por origen de familia o cultura, divergencias que hay en todas las parejas, pero que nosotros hemos a pesar de ello nos hemos mantenido en el compromiso inicial, y damos gracias a Dios, y pedimos que la cultura de la convivencia, la cultura de la familia se vaya acrecentando en la buena línea, como dijo el papa claro que hay que poner sobre la mesa las diferencias de apreciaciones o criterios, pero en el dialogo hay que llegar a acuerdos, y si ha habido ofensa, o disgusto por una u otra parte, hay que pedir perdón antes que el día se apague porque es humano que en toda convivencia se produzcan roces. Ayer en una reunión de familias neocatecumenales, un niño de 4 o 5 años al darse mutuamente la paz, dice a sus padres, ¿vosotros que ayer os discutisteis no os pedís perdón? Los niños nos enseñan mucho. Creo que el gran orgullo de esta generación pierde las personas, no se dan cuenta de la gran satisfacción que se siente después de haber pedido perdón; en eso está el malestar que abunda actualmente como una carcoma que va comiendo hasta el punto que la carcoma puede con todo. Un ejemplo el otro día la entrevista entre el papa y Raúl Castro sentados a banda y banda junto a una mesa sencilla, el papa retiró un bote de bolígrafos que había en media para quitar barreras para ofrecer una mayor cercanía entre ambos. Muchas veces nos cuesta ver la cercanía de Dios; Jesús nos llama y nos dice que él está cerca, que él nos habla al oído, nosotros tenemos miedo de lo que Dios nos pueda decir, pero eso es un engaño, él todo amor, ¿que nos va a decir, que no nazca de su amor?, no puede hablarnos con exigencias, solo puede ofrecernos aquello que sea mejor para nosotros, a cada uno lo que corresponda, y el traspaso en el momento oportuno de Dios para nosotros. Ved el ejemplo de Maria en la anunciación, como le habló a través del ángel, y como respondió ella a la oferta de Dios. Este es el estilo de Dios. Pidamos al Señor que veamos su voluntad, en el vivir de cada día y en fe, ya que la muestra desde su presencia oculta y la estimemos de tal manera que sea preferente en todas nuestras decisiones. No sabemos lo que nos tiene preparado el Señor, pero mantengámonos en actitud abierta para acoger lo que venga de él en cada situación. Tengo un pensamiento respecto a esto que el Señor nos da dones, nos da gracias, pero los dones que nos da es en favor de la Iglesia, de aquello en lo que quiere hacer cumplir su voluntad entre los hombres, no me lo da por mí ni por mi goce, ni para que yo me hinche con las gracias que Él me da, sino que me lo da para servicio independientemente de si soy un santo o si soy un pecador, y por lo tanto como normalmente las gracias del Señor no miran si eres santo o pecador, así yo sé que soy pecador a pesar de las gracias que él me da, o yo soy pecador y además me da gracias y me las da no para mi satisfacción personal sino para el servicio de la iglesia, y yo haciendo mucho servicio a la iglesia con todo podría condenarme, porque mi santidad depende de mi voluntad de hacer, de mi respuesta a la voluntad de Dios, y como mi respuesta es deficiente por lo tanto no soy santo, sin embargo aprovecho lo que me da para servir a la Iglesia. Así estoy eludiendo todo lo que pueda ser engreimiento, o el creerme yo como un privilegiado de Dios, aunque uno sea como sea dios va y hace la obre en él, y la hizo en uno de los que Él escogió para apóstol suyo sabiendo que le iba a vender sabiendo lo que iba a sacar de él, y no obstante, le llamó, él sabía lo que el Señor le iba manifestando y en cambio a la hora que menos esperaba lo vende. Me llamó mucho la atención esta semana santa pasada en una película que dieron por televisión, una escena en la que estaba san Pedro y se presentó ante él Barrabás y entonces otro de los que estaban allí le dijo ¿Cómo te vas a citar con Barrabas sabiendo lo que es y lo que ha sido? Pedro contestó: Si Dios le ha traído aquí tendrá sus motivos, pues cada día hemos de conformarnos con lo que hay guste o no, puede costarte más o menos hacerlo, pero debes conformarte y no forzar la situación negándote a hacer aquello que se te propone. No quiero hacerlo porque soy… porque no quiero hacerlo, porque no me lo merezco, o porque no quiero hablar con esta persona, pues mi respuesta cuando se me tuerce una cosa, o me hacen propuestas que me contrarían, señor tú lo quieres así, pues sea así. Vamos a invocar al Espíritu para que nos dé una palabra: “Ven Espíritu de Dios sobre mi…” 1ª a Filemón: “Pablo preso por amor de Jesucristo y Timoteo , su hermano”( estos dos son los que mandan la carta), “ al amado Filemón, coadjutor nuestro ( Filemón les ayuda en la misión)” y a la carísima hermana nuestra Apia, su esposa y a Arquipo, nuestro compañero en los combates, o en la milicia de Cristo y a la iglesia congregada en tu casa“ (Iglesia = comunidad cristiana) gracia y paz a vosotros de parte de Dios nuestro padre y del señor Jesucristo, acordándome siempre de ti en mis oraciones querido Filemón y doy gracias a Dios. Viendo la fe que tienes en el Señor Jesús y tu caridad para con todos los santos fieles, y de qué manera la liberalidad que nace de tu fe resplandece a la vista de todo el mundo haciéndose patente por medio de todas las obras buenas que se practican en tu casa por amor a Jesucristo”. Veo que en las cartas esas del nuevo testamento destaca una cosa preciosa, que es esta fraternidad entre todos, esta colaboración, ese amor que traslucen, que se derrama en el mismo texto; ya empieza preso por amor a Jesucristo, dice que lo importante en su vida es el amor a Jesucristo Timoteo está con él y escribe la carta, y por ese amor a Jesucristo escribe al amado Filemón, el que nos ayuda está en nuestro equipo, es de los nuestros, creo que el mismo Pablo está poniendo de relieve esta relación amorosa y de colaboración que hay entre ellos, y a la carísima hermana nuestra Apia, recordáis aquellos inicios de homilía con el “Carísimos hermanos…” Carísima quiere decir muy apreciada, muy estimada, muy amada, por tanto también este afecto va para Apia y a Aquipo también carísimo hermano, que es compañero en la milicia de Cristo, como destacando aquellas virtudes que se atribuían a los militares, la disciplina, el arrojo a la misión, por lo tanto persona muy activa en los trabajos del equipo, y a la comunidad cristiana que se reúne en tu casa, todos muy queridos todos o muy apreciados, notamos que tiene un aprecio muy personalizado por cada uno, explica los detalles del conocimiento profundo que tiene de cada uno de estos a quienes dirige la carta. Es bonito porque hemos hablado del amor de Dios, de su presencia en medio de nosotros , y creo que estas manifestaciones de amor, son signos de la presencia de Dios en esta comunidad, el deseo de Pablo es gracia y paz de parte de nuestro Padre y nuestro Señor Jesucristo. Gracia y paz: gracia es el don de la gracia el don de vivir en gracia, el don de vivir de la fe, el don de vivir del amor de Dios, el don de vivir de la esperanza, la confianza en Dios, la gracia es eso: el don de ser purificados por Dios. Y la Paz: el don de esta tranquilidad de esa serenidad que podemos disfrutar en la vida gracias a la salvación que Dios nos da. Es deseo de lo mejor que podemos obtener por la fe en Cristo, la gracia y paz la desea de parte de Dios nuestro Padre celestial y del Señor Jesucristo, su hijo, Pablo contempla que actúa en nosotros el Padre celestial y en función de la voluntad del Padre celestial Jesucristo actúa en nosotros, motivo para que demos soporte a los sacerdotes que nos acompañan en el camino de salvación y misión. Preguntamos al Señor que quiere que haga, a quien tengo que atender hoy en su nombre; la necesidad nos obliga a darnos. “ Así que yo he tenido gran gozo y consuelo en las obras de tu caridad viendo cuanto recreo y alivio han recibido de tu bondad, hermano mío, los corazones de los santos y fieles necesitados” está confirmando esto lo que está explicando la hermana, cuando Pablo le dice a Filemón lo que acabamos de leer : gozo y consuelo en las obras de tu caridad que han recibido los necesitados, quien lo necesite reciba de nosotros el amor que les ofrecemos, la ayuda que les ofrecemos, la atención, el cariño, repartiendo amor por el mundo, es nuestra obligación; ahora comprometido con las elecciones municipales me da ocasión de hablar con mucha gente, y de dar cariño, dar amor, de saber escuchar, de comprender, de informar, de quitar malos entendidos, y de todo esto doy gracias a Dios. A continuación las intercesiones según las necesidades de los hermanos los que estamos y los que faltan. Avisamos que para san Juan acaba ese curso de oración.

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