Creo sinceramente que hay otros caminos para afrontar el problema
pero la sociedad no se pregunta porque sucede , y como es que la publicidad de los casos ocurridos aun favorece que abunden más los caso de violencia considerándolos la población como algo que fatalmente debe ocurrir, creo que a nivel popular no tiene relieve alguno el trabajo que sociólogos , psicólogos y psiquiatras, tendrían que explicar porque suceden.
Creo que el hombre que llega al extremo de matar, es porque llega a un extremo de sufrimiento moral intolerable y con Las muertes pretende liberarse de dicho sufrimiento. ¿Y de donde procede este sufrimiento? De la falta de concordia entre hombre y mujer relación en la que subyace frecuentemente el afán de dominio del hombre sobre la mujer, pero también por la falta de un dialogo que a ambos les lleve a no solo entender las razones del otro sino también a colaborar para reducir distancias, La dignidad de la mujer exige saber dialogar y acceder a los deseos de la pareja para calmar frustraciones del hombre, que le llevan progresivamente a un rechazo de la mujer, el hombre ha de saber reconocer el valor de los, servicios que la mujer le da en higiene alimentación, descanso, buen gusto en la presentación del hogar, economía equilibrada, ajustando las exigencias a lo disponible en cada momento. Ambos necesitan demostrarse mutuamente el esfuerzo personal en favor del conjunto familiar. Reconociendo mutuamente la aportación que cada uno hace a la causa común , llegaran a convencerse que se necesitan el uno al otro, y en que son capaces de colaborar, en que habilidades despunta la pareja para desarrollarlas para el bien del conjunto familiar.
Por este camino hay que vencer los celos y las venganzas, evitando dejarse arrastrar por fantasías que agudizan el dolor moral de uno u otro. las propias culpas llevan a desconfiar de la pareja.
Se necesita a nivel social una educación que auto controle estas desviaciones imaginarias.
He recibido luz que me permite conocer en profundidad la creación y en ella la generación humana, porque Dios ha puesto los impulsos sexuales humanos tan variados y diversos, para que variando con la edad, varia también la sensibilidad; en unos se debilita, y en otros se afianzan otros aspectos, a la vez que se reduce el ámbito de actividad de la persona; cuando se dice que la experiencia es un grado se refiere no solo el autoconocimiento que se enriquece con los años, sino también al conocimiento de la sociedad y el ámbito de las relaciones interpersonales; aprovechemos esta diversidad para el entendimiento mutuo, buscando la complementariedad, (las ordenes de alejamiento en este sentido son contraproducentes) la colaboración en unos resultados comunes. Porque me abriré a acoger toda realidad, renunciaré a buscar motivaciones de conductas exclusivistas, imperialistas y coactivas.
¿Porqué violaciones, violencia de género? Por falta de llegar a acuerdos y reconocer qué es cooperar mutuamente.
Quien viviendo en pareja necesita un uso regular del sexo como manifestación de los impulsos sensibles de la persona desarrollada adecuadamente, sino no es persona para vivir en pareja, aunque haya aceptado de entrada tener uno o dos hijos.
Con un enganche emocional, afectivo, difícilmente se producirá un acto de violencia, a no ser que esta persona esté enferma mental, o tenga esquizofrenia.
Y si hay el peligro de excederse en el número de hijos hay actualmente medios para limitarlos sin perjudicar a nadie, pudiendo a la vez disfrutar de la intimidad mutua afectiva y emocionalmente, imprescindible para mantener la unidad familiar.
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